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Ortodoncia invisible y ortodoncia tradicional, ¿en qué se diferencian?

Muchas personas se preguntan si es más efectiva la ortodoncia invisible o la ortodoncia tradicional y lo cierto es que no hay una técnica que sea mejor que otra, ya que cada una tiene sus ventajas e inconvenientes. El único requisito que debe cumplir es que sea efectiva para solucionar el problema del paciente.

La elección de un tratamiento u otro se deberá consensuar entre el profesional y el paciente barajando sus prioridades estéticas, el precio y el problema de alineación que hay que solucionar. En este post vamos a hablar de estos dos tratamientos de ortodoncia para poder comparar y elegir el más adecuado.

Ortodoncia invisible vs ortodoncia tradicional

Para empezar hay que decir que ambos tratamientos son muy efectivos para corregir la alineación dental y que, tanto los brackets, como la ortodoncia invisible pueden ser buenos o malos tratamientos dependiendo del ortodoncista y de los materiales utilizados. Vamos a ver con más detalle cada una de las técnicas:

Ortodoncia tradicional

Los ortodoncistas llevan muchos años trabajando con brackets fijos y siguen obteniendo resultados muy satisfactorios para todo tipo de maloclusiones. El tratamiento ha avanzado mucho, sobre todo con la incorporación de los brackets de baja fricción y brackets más estéticos, como los de zafiro, porcelana y brackets linguales. Estos avances han permitido que muchos adultos hayan optado por esta alternativa para corregir viejos problemas de alineación.

La ortodoncia tradicional se seguirá utilizando, no solo por su eficacia demostrada, sino también porque muchos pacientes prefieren este tratamiento por distintas razones, como el aspecto económico, por una posible falta de colaboración por parte de la persona o también por prescripción quirúrgica.

Sin duda que los brackets seguirán perfeccionando y mejorando sus prestaciones para adaptarse a las demandas de los pacientes y competir con otras técnicas de ortodoncia.

Ortodoncia invisible

La ortodoncia invisible o Invisalign se utiliza desde hace más de dos décadas y ofrece unas prestaciones tecnológicas muy interesantes y en constante desarrollo. Esta técnica permite al ortodoncista planificar y secuenciar con mayor precisión el tratamiento de principio a fin. De esta forma se consigue un mayor control que con los brackets fijos.

Lo que realmente marca la diferencia es que el ortodoncista puede predecir el movimiento de cada diente mediante un software informático. De esta forma, se pueden precisar mucho mejor los tiempos del tratamiento y el resultado final.

Por otro lado, los alineadores utilizados con la técnica Invisalign no ofrecen fricción, por lo que los movimientos de las piezas dentales son más suaves y proporcionan mayor confort y bienestar al paciente.

Aunque han aparecido más empresas dedicadas a la ortodoncia invisible, Invisalign es quien dispone de la tecnología más avanzada que permite una simulación digital de los movimientos dentales. Además, el tratamiento permite ejercer una fuerza en toda la superficie de las piezas dentales, algo que no sucede en la ortodoncia tradicional.

Diferencias principales entre Invisalign y los brackets tradicionales

El paciente encontrará muchas diferencias entre los brackets tradicionales y la ortodoncia invisible. Quizá la más importante es el hecho de que los alineadores sean removibles, es decir, que se pueden retirar para comer, la higiene dental o momentos muy puntuales, como una entrevista de trabajo, hablar en público, etc. 

Lo cierto es que el paciente debe llevar los alineadores el mayor tiempo posible (al menos 22 horas al día), pero el hecho de poder extraerlos, si se necesita, sin duda es una ventaja muy importante junto con la estética que proporcionan, ya que, como sabemos las férulas son transparentes y pasan prácticamente desapercibidas. 

Otro beneficio muy importante, como ya hemos dicho, es la suavidad con la que se mueven los dientes, ya que se ejercen fuerzas en toda la superficie de la férula, por lo que el paciente no siente ninguna molestia y prácticamente no se da cuenta del tratamiento.

Con los brackets tradicionales este confort es muy difícil de obtener, ya que el ortodoncista tiene que hacer ajustes cada poco tiempo para evitar que los hierros rocen en la encías o en alguna zona de la boca. En algunos casos pueden provocar llagas o rozaduras molestas en el paciente, algo que no ocurre con el tratamiento de Invisalign.

Otra ventaja importante de la ortodoncia invisible es que se pueden predecir con más precisión las revisiones del paciente, de tal forma que si la persona vive lejos se programan las visitas según la conveniencia del paciente siempre que sea posible, algo que es más complicado en la ortodoncia tradicional.

En el caso de pacientes con enfermedades periodontales el ortodoncista puede secuenciar el movimiento mucho mejor y el paciente puede cepillarse los dientes sin el aparato, por lo que se puede controlar la placa bacteriana, algo fundamental en este tipo de enfermedades.

Como vemos, ambas técnicas son excelentes para la alineación dental pero, a la hora de elegir, nuestro consejo desde Baquero Dental es que te pongas en manos de los mejores ortodoncistas para decidir cuál es la más adecuada para tu caso. Pide cita con nosotros y te ayudaremos a lucir tu mejor sonrisa. ¡Te esperamos!

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