La lengua fisurada es una afección lingual que, a pesar de su mal aspecto, no suele revestir ninguna gravedad y tampoco es contagiosa. Resulta totalmente indolora y no afecta en ningún momento a la vida cotidiana del paciente, por lo que no es algo de lo que haya que preocuparse, aunque no está de más que un profesional le eche un vistazo para evitar posibles complicaciones.
En este post vamos a explicarte en qué consiste la lengua agrietada o fisurada, sus posibles causas y los tratamientos disponibles para solucionarlo.
¿Qué es la lengua agrietada?
La lengua agrietada consiste en una alteración de la anatomía habitual de la lengua, ya que presenta múltiples fisuras y grietas en la superficie, aunque también pueden aparecer en los lados de la lengua.
Las fisuras pueden variar mucho, ya sea en profundidad, tamaño o cantidad, todo dependerá de cada persona. En ocasiones, las grietas son tan profundas que puede parecer que la lengua está dividida en distintas partes, pero no hay que alarmarse.
Por otro lado, no hay que confundir la lengua agrietada con la glositis migratoria, comúnmente conocida como lengua geográfica. Esta afección es diferente, ya que tiene manchas blancas o rojas redondeadas en la superficie de la lengua. Se le llama lengua geográfica porque las manchas recuerdan a las de un mapa.
Por qué se agrieta la lengua
La lengua fisurada puede no tener síntomas o, por el contrario, venir acompañada de dolor, inflamación o mal aliento. Sin embargo, lo más habitual es que se trate de una afección asintomática. La complicación más habitual que puede producirse es la candidiasis, es decir, una infección causada por el hongo Candida albicans.
Para evitar esto es muy importante que el paciente practique una higiene bucodental exhaustiva, sobre todo en la lengua. Esto permite eliminar los restos de comida que se acumulan en las fisuras después de las comidas. En caso de que no haya una buena limpieza bucal, la proliferación de bacterias aumentará y pueden aparecer infecciones.
En muchos pacientes, el origen de las fisuras en la lengua es desconocido, aunque es cierto que esta afección puede ser congénita y aparecer en cualquier momento de la vida. Otro aspecto a reseñar es que suele acrecentarse con la edad y que podría estar asociada con el síndrome de Melkersson-Rosenthal o el síndrome de Down. En otros casos las fisuras pueden aparecer por estos factores:
- Tabaco.
- Alcohol.
- Déficit de vitamina B.
- Alergias.
- Estrés y ansiedad.
- Reacción a medicamentos.
- Diabetes.
- Bruxismo.
- Factores genéticos.
- Reflujo ácido.
Limpiador lingual
Aunque la mayoría de la gente está acostumbrado a emplear cepillo, dentífrico e hilo dental para su higiene bucal diaria, es importante incorporar también el limpiador lingual para eliminar los restos de comida de la lengua. De esta forma se evita la aparición de grietas o fisuras en la lengua y se evita la aparición de posibles infecciones. El raspador lingual es barato y se puede adquirir fácilmente en las farmacias.
Tratamientos para la lengua fisurada
La ventaja que tiene este tipo de afecciones es que se detectan fácilmente a simple vista. Por tanto, el paciente si es observador puede verlo claramente frente al espejo y, si no es así, el odontólogo puede detectar la lengua agrietada en cualquier revisión rutinaria.
En la mayoría de los casos no es necesario ningún tratamiento ni la prescripción de medicamentos, por lo que podemos decir que el tratamiento consiste en mejorar la higiene bucal en todos los aspectos. Aparte de un buen cepillado, emplear hilo dental y enjuague bucal, como hemos dicho, resulta imprescindible emplear como último recurso el raspador lingual, sobre todo antes de acostarse.
Esta es la mejor manera de prevenir las fisuras. Sin embargo, si ya las tienes, lo más recomendable es utilizar el raspador lingual después de cada comida para que, poco a poco, se vayan eliminando todas las bacterias que se alojan en la lengua y, de esta forma, reducir las grietas.
Recomendaciones para lengua fisurada
Estos son algunos consejos, tanto para prevenir como para eliminar las grietas de la lengua:
- Evitar o reducir el consumo de elementos que irritan la lengua, como comidas picantes, amargas, saladas o excesivamente ácidas, ya que pueden producir inflamación, sensibilidad, malestar, dolor, etc.
- Evitar el alcohol y el tabaco porque aumenta la probabilidad de que aparezcan infecciones en la lengua y, por tanto, también de grietas.
Desde la Clínica Dental González Baquero, te recomendamos que al menor síntoma de fisuras o grietas en la lengua acudas a un profesional para descartar cualquier problema, ya que puede ser un síntoma de que algo no funciona bien en tu organismo. Si notas algún dolor, picor o ardor en tu lengua, pide cita con nosotros y nuestro equipo de especialistas te examinará para descartar cualquier patología que pueda suponer un riesgo para tu salud bucodental. Te esperamos.
